Los Monjes Tibetanos

Por Naomí / Imagen https://www.google.cl

Me llamó la Feñita para decirme que estaban los Monjes Tibetanos en Chile y que además estaban al lado de donde yo estaba viviendo en ese entonces.

Me dijo que me animara y fuera a ver de qué se trataba. La verdad es que me demoré su buen tiempo en ir a verlos ya que el cansancio, mis bajas energías y el corsé que utilizaba para afirmar mi espalda me hacían más difícil el caminar.

Para mi sorpresa el Centro Ohani quedaba sólo a un par de cuadras… ya les he comentado que el universo se encarga de que las cosas se den a su debido momento, y una vez más así lo fue para mí…

El martes 20/11/2012 a las 20:00hrs me estaba sentando en una sala para comenzar mi ritual con los monjes. Había un olor delicioso, una música solemne, un altar y cuatro monjes detrás de una mesa rectangular con varias deidades,  amuletos y otros objetos que hasta ese momento no sabía lo que eran.

Comenzamos el proceso de sanación con una ceremonia muy bonita, la cual no puedo revelar por completo y prefiero que esos detalles se queden guardados ya que cada uno experimenta cosas muy profundas y personales… una vez terminada la ceremonia después de un poco más de una hora estos hombres se quedaron en la sala para saludar a los asistentes. Uno de ellos me quedo mirando fijamente y al hacer contacto visual me llamó para que me acercara a él, ¡me sentí como la elegida!, y en un acto muy cariñoso me pregunto la razón del porqué estaba allí. Se me quebró la voz y le conté mi diagnostico. Entre lágrimas vi como este monje se dio la vuelta alrededor de la mesa y me vino a abrazar. Me calmo con su abrazo, su ternura y delicadeza. Realmente son seres de luz y compasión. Tomándome de las manos me dio unos consejos y me dijo que todo iba a estar bien, me volvió a abrazar, yo le di las gracias y me fui caminando a casa sintiéndome purificada y aliviada al menos por un instante.