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jueves, 19 de junio de 2014

El viejo roble


















Por Naomí / Imagen www.google.com
Y yo que me creía un viejo y fuerte roble… ¡nada de nada! Ha escuchar el cuerpo y los síntomas de hace ya dos semanas. Me invaden dolores de espalda, dorsal y cervical y hoy ya me tienen loca, sumamente desgastada, agotada. Tanto así que me fui a la clínica a pedir auxilio a mis doctores y comienza mañana la maratón hasta el lunes por la mañana. Uf! Que agote emocional… esa extraña sensación que aún no puedo describir ni al que tampoco le puedo poner nombre ya que hasta ahora no sé bien como definir.
Es una sensación de desborde. Y cuando le cuento esto a mis cercanos, a sabiendas, me trago las lágrimas para no afectar a nadie pero cuando se lo conté hoy a mi Sandra (enfermera de cabecilla) me chanté a llorar y sólo le pedí un abrazo bien apretado sin romperme. Ahí me sostuvo unos minutos, con nanai y diciéndome que me entendía y que todo estaba bien. Simplemente me desborde. Me sigo desbordando cuando escribo. Ando extremadamente sensible, a flor de piel y por más que intento ser un roble me vengo abajo ante la más mínima expresión de incertidumbre. No significa que tenga algo o que el cáncer este volviendo, simplemente es mi cuerpo que aún reacciona ante tanto veneno y desgaste. Es un cansancio que no da tregua. No quiero licencia, ni parar de hacer mis cosas. Estoy feliz trabajando. Soy feliz con mi Suc y con el entorno de amigas/os y familia. Sólo NO QUIERO SENTIR DOLOR FÍSICO y me cuestiono el por qué son estos síntomas (stress, regreso a la realidad, mucho estar sentada, mucho trabajar, responsabilidad, estudios, nuevos desafíos, nada de deporte, bla bla bla) y hoy ya tiré la toalla. Me volví a dar cuenta que no soy un roble, no soy Sor Naomí de los Andes, ni súper héroe. Tan solo soy un ser humano que lleva 9 meses de alta después de una gran batalla. Una lucha que gané pero que todos los días algo me recuerda que esto no ha sido en vano, que me tengo que seguir cuidando, que debo seguir trabajando en mí y conmigo y mi alrededor. Que no soy la única que siente lo que yo siento. Que como yo hay mucho más, también los hay mejores 

La maravillosa CÚRCUMA


















Por Naomí / Imagen www.google.com
La cúrcuma proviene de la planta Cúrcuma Longa y ha estado en la India como una especia hace siglos. Tradicionalmente, la gente utiliza la cúrcuma para agregar sabor a sus platos, con muchas culturas reconociendo la especia por sus numerosas propiedades medicinales. 
A medida que el uso de la cúrcuma sigue creciendo en popularidad, también lo hace el reconocimiento de sus muchos beneficios. Es por esta razón que muchos en todo el mundo han decidido comenzar a integrar la cúrcuma (en su mayoría a través de la ingesta de la cúrcuma) en su vida cotidiana. 
Una razón principal para la explosión de la publicidad y la investigación científica sobre la cúrcuma tiene que ver con su relación única con enfermedades como el cáncer, la enfermedad de Alzheimer, y mucho más. 
Los poderes de la cúrcuma sobre el cáncer en particular, sin embargo, han provocado un gran interés.  
Una forma sencilla, pero eficaz, para impedir el cáncer y proteger el hígado contra la enfermedad se encuentra en una especia común que se ha utilizado en la cocina india durante miles de años. 
La cúrcuma y, más concretamente, la curcumina, su ingrediente activo principal, continúa brillando como un imponente agente  especia  ‘súper alimento’ anti-cáncer, con una amplia gama de beneficios tangibles para la salud, incluyendo su capacidad de inducir la muerte de células cancerosas y prevenir la cirrosis.
La investigación constantemente está siendo publicada en relación con el poder nutritivo de la cúrcuma, y algunas de las investigaciones más recientes se destacan las muchas maneras en que esta hierba batallas cáncer.
No sólo la especia demostró una habilidad única para evitar que las células cancerosas invadan y se difundan, sino que también activa las proteínas clave responsables para el bloqueo natural, y la supresión formación de tumores. El equipo de la Universidad Nacional Yang-Ming en Taipei declaró finalmente que sus hallazgos apoyan la aplicación de que la curcumina en la terapia anti-cáncer de metástasis.
Y de nuevo en 2010, un estudio publicado en la Revista de Investigación de Ovario encontró que la curcumina tiene otro uso único en el tratamiento del cáncer.
Los pacientes con cáncer de ovario, que es difícil de tratar debido a la resistencia a la quimioterapia convencional y a la radiación, pueden ser efectivamente "pre-tratados" con curcumina, con el fin de mejorar la eficacia del tratamiento convencional del cáncer.
"El pre-tratamiento con la curcumina mejora la sensibilización a las terapias de quimio/radio en... las células de cáncer de ovario a través de múltiples mecanismos moleculares", escribieron los autores, que son de la Universidad de Dakota del Sur, de este estudio en particular. 
"El pre-tratamiento con [C]urcumin puede mejorar la eficacia terapéutica del cáncer de ovario".