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martes, 8 de abril de 2014

Suc


Por Naomí | Imagen Archivo personal
El viernes llegó un tesoro a mi vida, adopte una perrita y se llama Suc. Era algo que tenía pendiente hace 35 años y la semana pasada lo pude concretar y hacer realidad.
Ahora tengo una nueva compañera de vida.
Me acuerdo que estando en la clínica le pedí a Dios que a cambio de soportar todos los dolores y de luchar para salir adelante con el tema de mi cáncer me tenía que regalar un hijo(a). Le dijo que iba aguantar todo lo que me enviara porque era fuerte pero que por favor cumpliera con mi deseo de ser mamá. Hoy han pasado sólo 4 días desde que llego Suc a mi vida. Cuando la saco a pasear me cuestiono varias cosas y me fijo en su comportamiento y la aliento para seguir adelante. Suc fue rescatada de una casa con 90 perros más por lo que fue muy mal tratada, es temerosa, come basura y calcetines, es tremendamente sumisa ante sus pares, es regalona, querendona, buena para los besos y una agradecida.
Ayer pensé que quizás Suc es la guagua que me envió el universo, es la hija que le pedí a Dios.

Si alguien está interesado en adoptar un perrito o un gatito pueden hacerlo a través de ACDA (perritos de Cerro Navia) este es el link: https://es-la.facebook.com/perritosdecerronavia.callejeros háganse amigos de ellos y ojalá puedan ayudar con un aporte voluntario o tan sólo $1.000.- mensuales, depositar en la cuenta corriente de ellos y así poder ayudar con su bella obra de rescate de animales de la calle.

Lección del día

















Por Naomí | Video http://mundoclay.com/news.php?art=272 - Imagen https://www.google.cl
Me gustó mucho este video que puso una amiga en Facebook y me intereso postearlo.
No importa que no entiendas el idioma ya que los gestos hablan por sí solos.
Soy una agradecida de la vida y por eso comparto este video, es un reflejo de lo que creo y es una bonita manera de mirar la vida. Ojalá todos aprendiéramos e hiciéramos algo a diario para ser mejores personas.
Sonríele a la vida que ella también te va a sonreír… muchas veces no entendemos el porqué de las cosas. Pero no siempre hay que preguntárselo, ya que la respuesta llega sola, una vez que dejamos la ansiedad de lado y dejamos pasar un poco el tiempo.

Al menos eso he aprendido durante este corto tiempo. Ojalá a ti también te sirva.